
La ortodoncia en el embarazo es cada vez más frecuente, además de que los tratamientos para alinear los dientes con brackets se prolongan durante varios años. Por este motivo, es posible que hayas iniciado un tratamiento de ortodoncia y después te hayas quedado embarazada. Otra posibilidad es que quieras iniciar este tratamiento en el propio periodo de embarazo. Pero, ¿es recomendable ponerse brackets si se va a tener un bebé? En este artículo, te damos la respuesta. ¡Presta atención!
La ortodoncia en embarazadas ha de atender a esta condición para aplicar los cambios y cuidados acordes de modo que el desarrollo del feto no se vea alterado en ningún momento.
A su vez, durante el periodo de embarazo se producen numerosos cambios en la mujer, que también pueden afectar a las encías y dientes como ya tratamos en este post sobre salud buco dental durante el embarazo. Todo ello ha de ser estudiado con minucioso detalle para conseguir los mejores resultados.
LOS 6 FACTORES IMPORTANTES DE LLEVAR BRACKETS DURANTE EL EMBARAZO
Si tienes pensado iniciar un tratamiento de ortodoncia durante el periodo de gestación, debes tener en cuenta los siguientes factores.
Si estás decidida a comenzar, lo mejor es hacerlo en el segundo trimestre. El motivo de esta recomendación se debe a que el óxido nitroso, como anestésico, puede provocar abortos espontáneos durante los tres primeros meses.
En el tercer trimestre se ha observado que provoca contracciones e incluso puede desencadenar en un parto prematuro.
Por este motivo, y salvo que se trate de una urgencia bucal, desaconsejamos la colocación de ortodoncia durante el embarazo resultando preferible iniciarlo tras el parto.
2 – Si el tratamiento se inició antes de quedarte embarazada, respira tranquila.
Por otro lado, si ya has iniciado un tratamiento de ortodoncia antes de quedarte embarazada, no hay de qué preocuparse

Desde nuestra consulta de odontología en Tarragona te aconsejaremos ciertas modificaciones relacionadas con las radiografías, la prevención de la gingivitis en el embarazo, así como los hábitos que has de incluir de una forma más consciente en tu día a día.
En el caso de que comenzaras a llevar brackets antes del periodo de gestación, la recomendación pasa por llevar una higiene bucal más minuciosa y optar por realizar los mínimos cambios en la ortodoncia y en tu boca
A continuación, te hablamos más sobre ellos.
3 – Precaución especial al desarrollar radiografías

Como sabrás, la radiación emitida durante las radiografías, mediante la utilización de rayos X, requiere de protección para cualquier persona que se someta a ellas. Esto no es una excepción durante el periodo de gestación, sino que es necesario extremar aún más las debidas protecciones.
Antes de comenzar la ortodoncia, se suele realizar una radiografía completa para observar a la perfección el punto de partida de cada pieza dental y así analizar cómo va a realizarse el tratamiento de alineación.
Las radiografías para una ortodoncia en el embarazo se desaconsejan, salvo necesidad urgente y, por ello, es mejor posponer el tratamiento
Sin embargo, existen clínicas que disponen de radiografías de radiación muy baja para evitar que afecte al feto.
Aún así, es aconsejable utilizar un delantal de plomo sobre la barriga para evitar cualquier mínima radiación que pudiera llegar como consecuencia de la radiografía.
4 – Prevención de la gingivitis gestacional
El embarazo provoca cambios en el cuerpo de la mujer. Uno de ellos es el que afecta al aumento del flujo sanguíneo, pudiendo provocar inflamación en ciertas zonas como es el caso de las encías.
Este frecuente inconveniente ha sido bautizado como la gingivitis gravídica o gingivitis del embarazo.
En el caso de que comenzaras a llevar brackets antes del periodo de gestación, la recomendación pasa por llevar una higiene bucal más minuciosa y optar por realizar los mínimos cambios en la ortodoncia y en tu boca
Si sumamos los brackets durante el embarazo a la sensibilización de las encías debemos poner mucho más énfasis en la limpieza e higiene bucal.
Esto permitirá que se prevenga la presencia de sarro que puede desencadenar problemas mayores e inflamar más esta zona.
En algunos casos, podría considerarse sustituir los brackets convencionales por otros que permitan una higiene más profunda que los colocados en una época ajena a la gestación.
En cualquier caso, pueden realizarse varias limpiezas bucales profesionales durante el embarazo si se observa que la higiene que se ha empleado con anterioridad no resulta suficiente.
Asimismo, enjuagar la boca con clorhexidina es una buena alternativa para reducir la inflamación gingival.
5 – Mayor riesgo de caries durante el embarazo
Existen otros puntos a tener en cuenta si eres una embarazada con brackets. Como hemos dicho, debido a la gingivitis resulta necesario extremar la higiene bucal.
Además, durante la gestación existen un mayor riesgo de caries. Así, es preciso que la higiene sea máxima y que se evite la aparición de manchas blancas o descalcificaciones que pueden terminar provocando caries.
En el caso de que comenzaras a llevar brackets antes del periodo de gestación, la recomendación pasa por llevar una higiene bucal más minuciosa y optar por realizar los mínimos cambios en la ortodoncia y en tu boca
Para evitar la aparición de manchas blancas y caries, una opción recomendable para las embarazadas es utilizar otro tipo de tratamiento removible, como es el caso de la ortodoncia Invisalign.
6 – Visitas programadas al dentista
En este sentido, las visitas al dentista también tendrán que programarse con el fin de adaptarlas a los cambios.
Los odontólogos recomendamos realizar los mínimos cambios posibles durante los nueve meses que dure el embarazo, para finalizar el tratamiento de ortodoncia tras el parto.
En las visitas al dentista es aconsejable no tumbar excesivamente a la embarazada, evitando así posiciones incómodas para el bebé.
BRACKETS Y PARTO, RECOMENDACIONES ESENCIALES
El momento del parto es quizás el más controvertido para la ortodoncia en embarazadas.
No obstante, si se planifica perfectamente y con tiempo, no supondrá ningún problema y la ortodoncia podrá compatibilizarse con total normalidad.
La mayoría de los partos no generan ningún tipo de contratiempo adicional. Pero, si los ginecólogos se ven obligados a recurrir a la intubación de la madre, es recomendable que esta no porte ningún aparato que pueda soltarse. De este modo, evitaremos que se interfiera con los tubos para favorecer la respiración.
En otras palabras, si en el momento próximo al parto la embarazada está utilizando ortodoncia que puede soltarse o retirarse con facilidad, se recomienda hacerlo para facilitar la labor del ginecólogo durante la intervención.
Conclusión
La ortodoncia en el embarazo es posible, pero resulta conveniente que conozcas cuáles son los puntos clave a los que se debe prestar una mayor atención durante el periodo de gestación.
Los odontólogos deben atender a las radiografías, minimizándolas o anulándolas si es posible, a las caries y a la gingivitis.
Además, durante el momento del parto se debe estudiar la posible retirada de aparatos de dientes para facilitar la tarea de ginecólogos y médicos en el hospital.